Comisiones Obreras de La Rioja | 29 marzo 2024.

CCOO muestra su apoyo a las reivindicaciones del pueblo saharaui

    Durante el encuentro mantenido en el día de ayer entre Jorge Ruano, secretario general de CCOO de La Rioja y Abdalahe Hamad, delegado regional del Sahara Occidental, se han puesto encima de la mesa la actual situación de guerra en la que se encuentra el Sahara occidental y los problemas que sufre su población de más de 200.000 personas.

    12/02/2021.
    Abdalahe Hamad y Jorge Ruano

    Abdalahe Hamad y Jorge Ruano

    Ante estos hechos, CCOO exige posiciones firmes por parte del Gobierno de España respecto a la aplicación de las resoluciones de Naciones Unidas y el derecho de autodeterminación e independencia del pueblo saharaui conforme a la resolución 1514 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

    La ONU sigue siendo la máxima responsable de la ejecución del Plan de Arreglo y del cumplimiento de sus propias resoluciones para completar la descolonización del Sáhara Occidental con la celebración del Referéndum.

    Han transcurrido cuarenta y cinco años desde la invasión por Marruecos del Sáhara Occidental, dieciséis de ellos en guerra, y veintinueve años desde del despliegue en el Territorio de la misión de la ONU (MINURSO), para asegurar la celebración del Referéndum. La situación del Pueblo del Sáhara Occidental sigue siendo la misma que en 1975, o incluso peor por la tragedia acumulada durante estas décadas. 

    La chispa prendida ahora, de nuevo por incidentes en Guerguerat, no debe obviar la causa profunda del conflicto: la paralización, durante casi treinta años, del Referéndum de autodeterminación del Pueblo del Sáhara Occidental. 

    CCOO apoya las reivindicaciones del pueblo saharaui y hace de nuevo un llamamiento al Gobierno de España para que condene claramente estas violaciones y para que ejerza su papel, con contundencia, a la hora de conseguir una solución justa y definitiva en este último caso de descolonización sin resolver en el continente africano, que evite la prolongación del sufrimiento que el pueblo saharaui arrastra desde hace más de cuatro décadas.